Será pensamiento de abuelita, pero no creo que alguien decente (exceptuando a Mafalda, obviamente) se oponga a la idea de lo reponedoras que son las sopas. Para esto, pongámonos en contexto: estamos en invierno, viene llegando de un día terrible en la pega, se agarró de las mechas con el pololo o algo mucho más común, el carrete del día anterior estuvo demasiado prendido, las piscolas parecían agua y hoy, en la mañana, su yo interior sólo sabe decir (en voz bajita, porque su dolor de cabeza no aguanta mucho ruido) "NUNCA MAS TOMO".
En todos los casos anteriormente descritos, una sopa o consomé les solucionará el problema en un ratito, será lo suficientemente delicado para la guatita débil y además les alegrará el cucharón.
La receta de ajiaco es con carne de vacuno que sobró del asado. Como yo soy la Chef Frustrada, invento y varío las recetas a mi antojo, por lo que si no hizo asado, con un bistec también podria hacerlo. O con charqui. Con pollo cocido sobrante eso si que no, porque su sopita tendrá sabor a nada.
AJIACO
- 1 ó 2 papas peladas y cortadas en medias lunas
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- Aliños (comino, orégano, pimienta)
- 1 trozo de carne asada, cortada en tiritas.
- 1 huevo
- Cilantro picado fresco.
Sofría la cebolla cortada a pluma con la carne en tiritas, el ajo picado y los aliños, por unos 5 minutos. Agregue aproximadamente un litro de agua hirviendo, las papas, y deje hervir tapado hasta que las papas estén cocidas.
Apenas apague el ajiaco, agregue el huevo apenas desarmado, no batido, hasta que quede cocido con el calor de la sopa. Sirva con un poco de cilantro picado encima.
Apenas apague el ajiaco, agregue el huevo apenas desarmado, no batido, hasta que quede cocido con el calor de la sopa. Sirva con un poco de cilantro picado encima.
Si le gusta la maldad y su organismo lo resiste, una salsa de ají quedaría perfecto aquí |
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