SEGUIMOS EN LA ONDA SANA: LASAÑA FALSA DE ZAPALLITOS ITALIANOS

Sin ninguna modestia y arriesgando mi reputación de cocinera amateur, les digo lo siguiente: Esta receta LA LLEVA! Y mis razón para tal aseveración es porque es una receta light (lo único calórico de esta receta es el queso, y que también si Ud. quiere le puede poner menos, lo que yo no hice porque en esta vida me pueden quitar todo MENOS EL QUESO) y, a pesar de ser de bajas calorías, de verdad tiene sabor a lasaña...no como esos inventos vegetarianos, que aunque la intención sea buena, no nos pisemos los cucharones entre cocineros, JAMÁS una hamburguesa de soya reemplazará a una hamburguesa de vacuno, ni un asado de pimentones y cebollas reemplazará a uno de lomo vetado.NUNCA.

Pero esta lasaña es una comida rica y SABE A LASAÑA. 

Dicho lo anterior, comienzo con la receta:

LASAÑA DE ZAPALLITOS ITALIANOS

Ingredientes:

5 zapallitos italianos medianos.

4 tazas de salsa de tomates con verduras: Ralle una zanahoria, pique una cebolla, un tomate y un pimentón en cuadritos. Sofría todo con sal, ajo y orégano y un vasito de vino blanco, cerveza o si quiere ser fome, sólo agua. Agregue una bandejita de champiñones laminados y unas 8 a 10 aceitunas sin cuesco, en trocitos. Luego agregue uno o dos bolsitas de salsa de tomates y deje hervir unos 5 minutos. Deje reposar.  A esta misma salsa puede agregarle carne de soya o carne molida, pero la receta que hice yo fue solo con esos ingredientes y quedó muy buena. 

1/4 Kg. de queso mantecoso o chanco. Es una buena técnica para distribuir mejor y en menor cantidad el queso, comprar el trozo entero y rallarlo.

Preparación:

Lave bien los zapallitos italianos y córtelos en láminas de apróximadamente 1/2 cm de grosor. Aqui aplique criterio, no puede estar usando una regla en la cocina, el asunto es al ojímetro, que sean láminas no muy finitas pero tampoco tan gruesas y que todas salgan de un tamaño similar.

En una budinera, ponga un poco de salsa en el fondo, luego una capa de zapallitos, ordenaditos y sobrepuestos para que no queden muchos espacios vacios. Cubra con una capa de la salsa de verduras y un poco del queso rallado. Repita tres veces el proceso. Luego cubra con papel aluminio y lleve al horno una media hora, a fuego medio. Quite el papel y deje unos 10 minutos más.

 

 

La foto no le hace justicia. Se ve feo pero queda increíble.

Me dicen por interno que esta receta también puede hacerse con berenjenas, pero ahí tiene que arriesgarse Ud. a ver como queda. Yo tengo la intención de hacerla nuevamente, pero con una crema con espinacas. Ahí les cuento como me va.

Saludos a todos y no se olviden de pasar a comentar y difundir entre sus conocidos chef frustrados como yo :)

LOS LUNES EMPEZAMOS LA DIETA: ARROZ CON LECHE LIGHT

El otro día les conté que tenía que empezar la dieta. Me he comportado bastante, excepto por el fin de semana, ya que ahi la dieta se me va a las pailas. Pero bueno, hay que seguir intentando hasta que resulte y vuelva a ser esa regia veinteañera de mis tiempos universitarios (ahhh la nostalgia, lloremos todos).

Esta receta de arroz con leche objetivamente tiene muy pocas calorías. No es para irse al porcino y comerse una fuente completa, pero sí es una buena opción para no sufrir toda la semana comiendo manzanas verdes y jalea. Igual hay que compensar, así que si almuerza lechuga con atún, puede premiarse con un poco de este postre tan rico.

ARROZ CON LECHE LIGHT

1 lt. de leche descremada.

1 rama de canela

1/2 taza de arroz (crudo por el amor de dioc!, no el graneado que sobró del almuerzo)

Stevia (para mi, la mejor es esa "natural" que venden en polvo, resiste bien el calor y aunque use mucha cantidad, nunca queda amargo)

Ponga a calentar la leche endulzada con stevia a gusto y la rama de canela, a fuego medio. Cuando esté a punto de hervir, agregue el arroz y deje hervir, siempre a fuego medio, unos 20 minutos, revolviendo de vez en cuando para que no se pegue. Si como a los 15 minutos lo nota un poco seco, agregue un poco de agua hirviendo.

SI YO NO VOY A LA PLAYA, QUE LA PLAYA VENGA A MI: MACHAS A LA PARMESANA

Hace rato que ando con ganas de ir a la playa. De ir bien abrigada (porque pucha que hace frío en el litoral central) a pasear, mirar gaviotas y botecitos y por supuesto a comer cositas ricas de playa, como empanadas de queso-jaiba o churros con manjar. Por ahora no se puede, pero ya que ando en la onda marina y siendo fiel a la consigna "fácil, bonito y rico" de este blog, les dejo la receta de las machas a la parmesana.

Hay versiones en librillo (no se por qué le dicen así, pero se refieren a esas fuentes chicas de greda) pero yo creo que esa forma de preparación sirve cuando se usan machas enlatadas. A mi me gusta esta versión en sus conchas, tiran más pinta y es más práctico para comer con la mano cuando hay hartas personas.

También puede aplicarse este mismo criterio parmesano para las almejas (aunque son mas duras) o si Ud. es una persona elegante, distinguida y lujosa (no lujuriosa, ok?) como esta Chef, puede hacerlo con ostiones.

MACHAS A LA PARMESANA

Ingredientes:

Esta vez no puedo dar cantidades, todo dependerá de las que Ud. quiera hacer. Pero puedo decir que UN KILO DE MACHAS es más que suficiente para cuatro personas cerditas como yo. O incluso para 6 personas guatita de pajarito.

QUESO. De buena calidad y que se derrita. Aunque me apliquen la ley antidiscriminación: NO al queso gauda o al queso rallado en sobre.

*Opciones para que queden aun más deliciosas: perejil, crema de leche, pimienta, ciboulette.

Hay que lavar muy bien las machas porque siempre traen arena. Abrirlas es fácil,  pero igual no use un cuchillo afilado porque no queremos accidentes, solo queremos comer rico y ser felices. Una vez abiertas, descónchelas pero deje aparte la mitad de las conchitas. En la lata del horno, acomode las conchitas con una macha encima, ponga un POQUITÍN de crema,

(POQUITÍN: Equivale a 1/4 o 1/3 de cucharadita), y un toque de pimienta, perejil o ciboulette. Cubra cada conchita con una lámina de queso. De ahí, al horno unos 10 a 15 minutos, hasta que el queso esté derretido y doradito.

Mariscos y quesito, una pareja perfecta.

Si lo acompaña con un buen vino blanco, bien helado, lo disfrutará como todo un GOURMET.